viernes, 30 de julio de 2010

Kebab de pavo al cilantro.

Vamos a seguir con los platos veraniegos. La receta de hoy recuerda un poco a los kebabs turcos.
Necesitaremos cilantro, que es una planta que con suerte puede encontrarse en los hipermercados. No podremos encontrarlo en los clásicos botes de especias, porque el cilantro pierde sus propiedades al secarlo. A pesar de ello, es un ingrediente esencial en preparados como el curry, el mojo canario o el guacamole. Además, como se parece al perejil, viene bien hasta para decorar los platos en plan Argiñano.

Ingredientes -para 2 personas:
-500 gr. de pechuga de pavo
-2 yogures naturales.
-Unos tallos de cilantro
-1 Limón
-Comino molido
-Sal
-Pimienta
-Aceite de oliva.


Modo de elaboración:

Cortamos la pechuga en trozos o la compramos ya preparada así, como para estofado. Picamos finamente el cilantro.
Vertemos el yogur en un bol y le añadimos el cilantro picado, un pellizco de comino molido, un pellizco de sal, otro de pimienta y el zumo de un limón. Lo batimos con la batidora. Después apartamos un poco de la salsa que nos quede y la ponemos en una salsera.
Ponemos a marinar los trozos de pavo en el bol con el yogur y lo dejamos así por lo menos un par de horas.
Una vez pasado el tiempo, podemos asar el pavo en una sartén con un poquito de aceite. Es lo más sencillo. Pero si queremos que se parezca más a un kebab, podemos ensartarlo en unas brochetas y hacerlas a la plancha. O meter los trozos en un bocadillo de pan de pita. En cualquier caso, utilizaremos la salsa que hemos apartado como acompañamiento.
Afiyet olsun!

martes, 27 de julio de 2010

Carne a la piedra.

La primera vez que probé carne a la piedra fue en el restaurante Vivaldi, en el Barrio Húmedo de León. Me gustó tanto que desde entonces, cada cierto tiempo, sobre todo en las noches de verano, me gusta preparar en casa algo similar.
La piedra que yo utilizo es una que me regalaron hace ya unos años. No es más que una bandeja con una parrilla eléctrica sobre la que se coloca una plancha de granito negro. Se enchufa a la corriente y se deja así el tiempo que indiquen las instrucciones del aparato -en mi caso, media hora. Para entonces la piedra está que arde. Se desenchufa y se saca a la mesa, en la que previamente nos hemos ocupado de preparar lo siguiente:

-Filetes de ternera -del grosor que cada uno prefiera.
-Sal gorda o en escamas.
-Pimienta molida.
-Un poco de tocino, aceite o foie.
-Un diente de ajo.

El procedimiento es sencillo. Untamos sobre la piedra el tocino, que suele ser de cerdo. En mi caso lo he utilizado de vaca. Si no tenemos tocino queda muy bien con foie, o incluso simplemente con aceite de oliva. Esto, aparte de para que la carne esté más sabrosa, se hace para evitar que se pegue. Luego pinchamos un diente de ajo con un tenedor y lo dejamos que haga un poco de patinaje artístico por la piedra. Una vez la piedra embadurnada y humeante, cada uno se coge su filete y se lo hace vuelta y vuelta y con el punto que le apetezca. Después se sazona y a disfrutarlo.

Cocinar con una piedra caliente -de hecho, muy caliente- tiene sus ventajas y sus inconvenientes.
De entre los inconvenientes, digamos que hay que tener cuidado de no calentarla demasiado y de no mojarla en exceso al lavarla. Si no se tiene cuidado con esto, la piedra se puede romper, y si le da por resquebrajarse de manera violenta nos puede romper algo a nosotros, de paso. Otro inconveniente es que exige comer con cierta prisa. Aunque las piedras están hechas de materiales que conservan muy bien el calor, al final se enfrían.
De entre las ventajas, la mayor sin duda está en lo que tiene de caprichoso: Son ideales para sacar a la terraza una de estas noches de verano. No hay que cocinar y, además, es una manera saludable de comer.
Ni que decir tiene que la piedra se puede usar para muchas otras cosas, no solo ternera. También va perfecta para el pollo o el pavo y para la mayoría de los pescados. Por no hablar de las verduras.

Así que ya sabéis, coged el cuernófono y decidles a Vilma a Betty y a sus respectivos esposos que agarren el troncomóvil y se vengan a cenar unos deliciosos filetes de diplodocus en la rocaparrilla. Buen apetito y cuidado, que quema.

sábado, 24 de julio de 2010

Carta a Fidel Castro de Muhammad Reza Hakimi.

Con frecuencia he escrito aquí mi opinión favorable a la mutua influencia benéfica de socialismo y religión. Ni que decir tiene que esto no es ninguna novedad: en el ámbito cristiano, ya desde los tiempos del propio Marx, había quien opinaba de este modo y desde entonces la nómina de grandes pensadores y grandes luchadores que se han situado en la intersección de ambos mundos es larga e influyente. Un "historiador" como Ricardo de la Cierva le ha dedicado al fenómeno varios de sus más famosos e infames libros, como "La hoz y la cruz". En ellos queda patente la alarma que causa entre los fascistas como él esta alianza, la de la hoz del campesino y la cruz en la que es colocado por los explotadores.
Es paradójico que esta dimensión socialista sea aun más desconocida en el Islam, cuando ciertamente la justicia social es uno de los pilares fundamentales de esta religión, especialmente en su rama chií. Cuando el Islam habla de justicia social no habla sólo de caridad, o de acciones individuales de misericordia y desprendiiento de lo material, sino también y principalmente de una efectiva organización social que garantice mediante el uso del poder político tales derechos. En el Islam no sólo se nos exige a los creyentes practicar la justicia social en el pequeño ámbito privado de nuestras posibilidades, sino que requiere un sistema político que castigue duramente a los explotadores y usureros e impida efectivamente la existencia de pobreza, abusos, etc.

Una curiosa prueba de esta sintonía la constituye la carta que el hoyatoleslam Muhammad Reza Hakimi dirigió a Fidel Castro, elogiando su papel de oposición a las políticas criminales de EE.UU. y su compromiso con la defensa de la dignidad humana frente al poder del dinero y resaltando los puntos en común que su ideario tiene con la concepción chií del Islam. Para ello recurre a una buena lista de citas extraídas de las tres grandes fuentes textuales chiítas: el Corán, los hadices o recopilación de dichos atribuídos al profeta Muhammad y los atribuídos al Imam Alí, yerno de Muhammad.

Destaco aquí algunos:

-Cualquier persona que reconquiste el derecho de un oprimido de la mano de un opresor estará en el Paraíso. -Cualquiera que confiese algún delito luego de haber sido asustado, esta confesión carece de valor. -Inspeccionar y controlar a los mercados y precios es algo necesario y todos aquellos vigilantes e inspectores que traicionen, deben recibir las más fuertes penas. -No deben pensar que la sociedad puede llegar a la dicha sin ejecutar la justicia. -Si un gobierno fuese islámico, no habrá ninguna injusticia ni siquiera con respecto a un ser humano no musulmán y nadie bajo un gobierno islámico deberá permanecer privado y sufrir carencias, aunque no fuese musulmán.

Tras recibir la carta, Fidel invitó al clérigo iraní a Cuba y mantuvieron una larga conversación. Parece que Castro declaró:

"Si no hubiera sido por algunas preocupaciones, les diría que soy shia duodecimano."

Podéis leer aquí la carta completa. Lamentablemente, la traducción al castellano deja mucho que desear, pero creo que más o menos se entiende el contenido.

Estas alianzas intelectuales hacen saltar las alarmas en los fascistas más paranoicos, como el inefable Gustavo de Arístegui, que desde hace años pretende avisar a los españoles de un terrible peligro que se avecina: nos habla de "entre 250 y 400 jóvenes proetarras que se han convertido al Islam." En la línea del otro inefable conspiranoico ultra Iñaki Ezkerra, que ya nos asustó en su libro "ETA pro nobis" con esos siniestros párrocos vascos que esconden amonal en las sacristías.

El teólogo y fraile dominico brasileño Frei Betto escribió hace ya 25 años un libro con sus conversaciones sobre religión con Fidel Castro, libro que creo que hoy posee aun mayor vigencia.
Podéis leerlo aquí.

martes, 20 de julio de 2010

Hummus

El hummus es un delicioso puré de garbanzos aliñado con algunas especias. Es uno de los alimentos más sanos -y baratos- que nos ha regalado la gastronomía tradicional del Mediterráneo. El significado de hummus en árabe es "garbanzo" y con este nombre se conoce en varios de los países en los que se consume: Grecia, Turquía, Siria, Palestina y todo el Magreb. Si tenemos en casa uno de esos botes o latas de garbanzos en conserva, nos lo podemos preparar en cinco minutos y sin apenas manchar la cocina.
Aquí vamos a ofrecer la receta estándar de hummus, que es el hummus magrebí, pero nada nos impide hacer pruebas con nuestras especias preferidas.

Ingredientes:
-Un frasco de garbanzos en conserva (500 gr.)
-Sal.
-Aceite de oliva.
-Un yogur natural.
-Pimienta negra.
-Comino.
-Un limón.
-Un diente de ajo.
-Tahine -o aceite de sésamo.

Modo de preparación:
En un escurreverduras vaciamos los garbanzos del frasco y los lavamos con agua del grifo para que se les vaya el sabor a conserva. Los ponemos en un bol y añadimos el yogur, un chorro de aceite de oliva, el zumo de un limón, el diente de ajo picado, un pellizco de sal, otro de pimienta y otro de comino. El tahine es una pasta de semillas de sésamo o, como las llamamos tradicionalmente en castellano, de ajónjoli. Si tenemos tahine, le ponemos una cucharada sopera. Yo no tenía en casa y he utilizado en su lugar aceite de sésamo, y también me ha salido muy rico.
Se pasa todo por la batidora y cuando ya no haya grumos se sirve en un plato.
Está tan rico que podemos comerlo tal cual, a cucharadas. Pero si queremos un poco más de sofisticación, podemos untarlo en palitos de zanahoria, en biscotes o como ingrediente de canapés. Yo lo he tomado con bastoncitos de zanahoria y aceitunas negras.
Aunque es prácticamente imposible que este plato siente mal, como siempre, ¡buen provecho!

domingo, 18 de julio de 2010

Desventuras de siete gusanos en España

Ayer lei un titular en la prensa que me llenó de alegría:

"Moratinos afirma que todos los presos políticos serán liberados"

Por desgracia, no se refería, como parecía lógico leyendo el titular, a los presos políticos de España, sino a los de Cuba.

En un momento histórico en el que en nuestro país ya no se concede el estatus de refugiado político a nadie que no sea iraní o cubano, siete terroristas se presentan fuera de toda legalidad vigente pidiendo asilo, un chalet y un yate como el del Rey.
Dicen ellos que las cárceles de Cuba son horribles y que han sufrido innumerables torturas, pero el caso es que el dictador Fidel los deja irse a donde les dé la gana y, así, llegan a España rollizos y con sus corbatas de seda y sus buenas camisas de rayas.
Las huelgas de hambre de estos "periodistas" -así se denominan ellos- deben ser a la japonesa, es decir, deben consistir en comer el doble de lo normal...

A estos héroes del capitalismo, los acompañan sus familias y están todos ellos mantenidos por el estado español, el mismo que no tiene dinero para los ancianos y enfermos, por no decir para el resto de emigrantes y refugiados. Sin embargo, son tan inconformistas que enseguida se han empezado a quejar. Es lo que tiene ser disidente...

Se quejan de tener que convivir con inmigrantes, de falta de privacidad y de tener que compartir baño. No es de extrañar: pobrecillos, con sus corbatas y su clase y teniendo que convivir con chusma de chándal y zapatillas...
Por lo visto, lo que ellos querían es ir a Miami, sin duda el lugar que mejor les va. O quizá esperaban que el gobierno español les facilitase un chalé en La Moraleja con servicio y un puesto de trabajo en la Obra social y Cultural de la Caixa, o de Asesor en la FAES, o cualquier mamonada por el estilo, pero con un buen sueldo de 10.000 euros al mes. Vaya decepción han debido llevarse.
Para arreglar este lamentable malentendido, yo propondría que cada uno de ellos sea acogido por una buena familia española, que cumpla el doble requisito de un inconfundible amor a la libertad de mercado y un nivel económico acorde con las necesidades de los refugiados. Se me ocurre que Esperanza Aguirre puede acoger a uno en su domicilio. Ana Botella a otro. A Rita Barberá le reservamos el más gordito de todos... Seguro que la Familia Real puede acoger incluso a un par, dado el tamaño de sus mansiones y de su campechanía. Y el de la corbata más chillona le iría perfecto a Agatha, la señora de su colega en el periodismo serio y comprometido. Como la Iglesia Católica también ha participado mucho en el tema, podríamos adjudicarle otro a Rouco Varela: le puede colocar de jefe de prensa y asistente personal. No me cabe duda de que todos dormirán muy contentos por las noches abrazados a sus respectivos ejemplares caribeños de Gusiluz.

Y es que Cuba tiene tal encanto que nuestros amigos, viniendo de esos terribles lugares que deben ser las cárceles cubanas, se quejan de los albergues españoles.

Pero su decepción tiene seguramente otra causa añadida. Y es ésta: ¿quién les va a pagar los servicios prestados en pro del anticomunismo? ¿Una mierda de albergue es lo que les ofrece la CIA por su arriesgado trabajo? Pues claro, ¿qué se creían? ¿Es que no recuerdan que se les pagó para acabar con la Revolución? ¿Que les pillaron enseguida y que quienes les pagaban quedaron en evidencia? ¿Es que aun pretenden que se les recompense por hacer tan mal su trabajo? Roma no paga a traidores, pero a traidores tan inútiles, aun menos.
Así que me temo que si quieren vivir en Miami, no les va a quedar más remedio que concursar en OT. Si Bisbal lo ha conseguido ¿por qué no ellos? Pueden formar un septeto: "Los Sabandijeños."

En fin: estos siete gusanos rollizos como babosas aterrizaron en España y nadie vino a aclamarlos. Seguramente los pobrecillos esperaban un recibimiento multitudinario en el aeropuerto ¡pero los teledirigidos españoles habían gastado ya todos los vítores con los futboleros de la Roja! Resulta que llegan aquí y todo el mundo pasa de ellos. Lo de El Mundo es literal porque este ejemplo de prensa amarilla-bilis, intentó darles cuartelillo al principio... Pero hasta ellos han salido corriendo ante el bochorno producido por las declaraciones de los "intelectuales" de la oposición cubana. Joder con los intelectuales... Si estos son los cerebros cómo serán los peones...

jueves, 15 de julio de 2010

Obras.

Debajo de mi casa llevan más de dos meses de obras. De ocho de la mañana a nueve de la noche, los martillazos en la estructura del edificio son el ruido más liviano. Mi vecina es muy aficionada a construirse una casa nueva de vez en cuando. Ciertamente, sus gustos en materia de decoración rivalizarían con los de Julián Muñoz y los de Sauron.
-Al principio tenía ella un pequeño jardincito en la entrada y otro en la parte trasera. Lo primero que hizo es talar los árboles y poner baldosa en vez de hierba.
-Luego se construyó una casita de planta octogonal en lo que era el jardín trasero.
-Después, en el patio delantero, arrancó las carísimas baldosas que acababa de poner y las sustituyó por madera de teca. Parece increíble que alguien considere adecuado poner madera en un suelo al aire libre, pero, en fin, es verdad que los ingleses ponen moqueta en la cocina y el baño. Lo curioso es que la madera de teca es extraordinariamente cara y, además, es una especie en peligro de extinción.
-Más tarde, en el centro del patio de tarima de teca, decidió instalar una canasta de baloncesto para diversión de sus niños, así como un sofá del mejor cuero. Era curioso ver una casa que en vez de jardín como las demás poseía una especie de cancha de baloncesto surrealista...
-En invierno, llegaron las humedades y tiró la pared del jardín para colocar otra que a día de hoy está aun más húmeda que la anterior.
-Por último, este verano ha decidido emplearse a fondo: se ha ido varios meses de casa y ha contratado a una cuadrilla de obreros portugueses a los que a día de hoy puedo considerar ya mis vecinos. La casita octogonal del jardín trasero ha sido destruída. En su lugar han construído otra aun mayor cuyo tejado está a un palmo del alféizar de mi ventana. La teca del patio ha sido arrancada y me pregunto qué pondrán ahora en su lugar ¿oro? ¿moqueta de auténtico visón? ¿piel humana...?
Dicho sea lo anterior para enmarcar como es debido la pequeña historieta que a continuación viene. Quiero añadir, además, que no es que yo sea cotilla, pero las conversaciones en estas casas se oyen demasiado bien. Y los martillos hidráulicos, ni os cuento...

Los obreros viven en la casa en la que trabajan. Tras la larguísima jornada, al anochecer, se preparan la cena con un hornillo y emprenden una amigable tertulia o llaman a su familia por el móvil. Luego descansan, supongo que en sacos de dormir, hasta que el madrugador sol del verano les indica que deben ponerse al tajo de nuevo. Yo ya no uso despertador, porque el martillo, el taladro o la sierra se han hecho cargo de esa función todas las mañanas de este largo estío que me está tocando vivir.
A veces tienen visita. La dueña de la casa aparece ataviada con ropa de marca para dar instrucciones bastante surrealistas a sus obreros. Ellos, con la tradicional socarronería lusa, le siguen la corriente. A veces se trae a los niños, que visten los uniformes oficiales de su equipo de fútbol. Un obrero se dirigió a uno de ellos:
-¿Te gusta el fútbol?
-Cállate gilipollas -respondió el nene.
Ni que decir tiene que los encargados de hablar en castellano para que la dueña les entienda son ellos. Uno de los primeros días de la obra, otro obrero se dirigió a ella en perfecto castellano:
-Qué paisaje tan bonito tienen ustedes en este pueblo, todo tan verde... Esta mañana he visto como unos petirrojos se cortejaban en este árbol.
Mi vecina debió quedarse con la misma cara que si le hablasen de trigonometría, a juzgar por los segundos de silencio subsiguientes. Luego, con un tono dubitativo, respondió:
-Sí... Es muy bonito de ver...

A los dos días, el penúltimo árbol yacía arrancado y partido en dos en el container de escombros que han colocado en mi raya de aparcamiento. Qué mejor sitio. Como yo no uso coche...
Este fin de semana pasado, a la hora de la cena, aparcó al lado del container el coche del que parecía el contratista, un hombre de nítido acento levantino. Sus empleados le ofrecieron amablemente lo que estaban cenando y él se quedó a charlar un rato. Salió el tema de las corridas de toros y los portugueses no comprendían cómo era posible que en España se torturara tan salvajemente a los pobres animales. Como acababa de ganar la Roja los mundiales, su jefe les hizo ver que los ignorantes y los atrasados eran los portugueses. Tenía razón ¿acaso no quedaba demostrado con el hecho de que ellos eran unos currantes de mierda y él un avispado empresario? Además ¿quiénes eran campeones del mundo? ¿eh? ¿quiénes...?
Los obreros quedaron un rato en silencio. El jefe se marchó. La noche caía. Uno de ellos se fue al otro patio, a hablar con su mujer por el móvil.




Cuando termine esta larga obra, que con seguridad no será la última que emprenda mi vecina, una cantidad indeterminada de dinero negro circulará por el país. Unos obreros portugueses podrán llevar a sus familias un poco de respiro económico para afrontar el invierno -en invierno hay menos obras. Un empresario valenciano se comprará un BMW de importación. El mundo tendrá un poco menos de verde y un poco más de hormigón. Pero sobre todo habré cambiado yo: mi cabeza se habrá habituado al ruido intenso, mi estómago a las condiciones indignas de trabajo, mi alma a la idea de que el mundo se desmorona... Aunque también habré aprendido algo positivo: me habré admirado de la serena dignidad de estos obreros que, valiendo mil veces más que la chusma que les paga y explota, han sabido sentarse cada noche a cenar charlando amigablemente en torno a un hornillo, como si fueran soldados en el frente de esta inacabable guerra que la estupidez, la fealdad y la maldad, con las armas del capitalismo, han emprendido contra todo lo noble y hermoso que aun alienta en este mundo.

lunes, 12 de julio de 2010

Boletus al cacao.

Vamos a preparar una receta que puede parecer chocante pero, según los sujetos experimentales que la probaron, está buenísima.
Bien, si disponemos de boletus naturales los limpiamos suavemente antes de cocinarlos con un paño húmedo... ¡pero nunca con agua! Y si son en conserva, pues un trabajo que nos ahorramos, porque suelen salir muy buenos también.

Ingredientes para 2 personas:
-250 gramos de boletus,
-1 bandeja de ajos frescos,
-1 pastilla de caldo de ave,
-1 cucharada sopera de cacao en polvo,
-Aceite de oliva,
-Sal,
-Pimienta,
-Pan rallado,

Modo de elaboración:
Limpiamos los ajos tiernos quitando el penacho y la primera capa y los cortamos en rodajitas muy finas.
Vertemos un chorrito de aceite de oliva en una sartén y sofreímos los ajos hasta que estén dorados.
Después echamos los boletus al aceite y los salpimentamos. Entonces deshacemos la pastilla de caldo en 50 ml. de agua y añadimos la mezcla. Espolvoreamos con una cucharada de pan rallado y otra de cacao y los dejamos a fuego muy bajo, removiéndolos de vez en cuando.
Si los hongos venían en conserva, bastará con tenerlos unos diez minutos. Si son frescos, requerirán al menos el doble de tiempo. Lo mejor es ir comprobando a cada rato el grado de ternura.
Tened en cuenta que el cacao en polvo no es Cola-Cao. El cacao no lleva azúcar. Se vende en cualquier súper.
Ya tenemos nuestros boletus sabrosos y listos para comer. El chiste insulso del día es éste: "Esto de cocinar hongos con cacao es un marrón."
Pido disculpas... y os deseo buen provecho.

domingo, 11 de julio de 2010

Comiendo fuera. Hoy, Casa Mirones, en Pasai Donibane.

Es verdad que el restaurante del que hablamos hoy nos ha parecido muy recomendable, pero hay que reconocer que buena parte de su valor se lo toma prestado al lugar en el que se encuentra. Pasai Donibane -Pasajes de San Juan- es una pequeña villa de pescadores cuyo casco antiguo consta de una única calle encajonada entre el monte Jaizkibel y la bocana del puerto de Pasajes. Si hay algo en Gipuzkoa que todavía recuerde a la belleza de otros tiempos es esta calle estrechísima, flanqueada de antiguos y húmedos caserones de piedra y ventanas con geranios. Si no fuera por los coches de los vecinos, que pasan de vez en cuando -obligándote a refugiarte en un portal, pues hay tramos en los que no caben un coche y una persona juntos- parecería que nos hemos trasladado al siglo XIX.
Enfrente de Pasajes de San Juan, al otro lado de la bahía, está Pasajes de San Pedro. Ambas localidades mantienen una rivalidad tradicional que se refleja en las traineras, es decir, en las regatas. Tiene gracia que las regatas famosas en el mundo sean las de Oxford y Cambridge, porque cuando se han enfrentado a Pasajes rara ha sido la ocasión en que los ingleses no han sufrido humillantes derrotas.
Hablando de derrotas, en una placa colocada en una pequeña ermita de esta calle se conmemora la victoria en 814 del ejército formado por vascos y musulmanes frente a las tropas de Carlomagno, que pretendía convertir el sur de los Pirineos en parte de su imperio. La tradición cuenta que en ese grupo de valientes iban muchos sanjuandarras. Y, hablando de imperios, los vecinos de San Juan, en este país gobernado por don Paco López, siguen siendo todavía hoy de los más concienciados con la causa de la independencia y el socialismo.
Para colmo de bienes, este pueblecito de una sola calle está lleno de buenos restaurantes en los que se puede comer un pescado excelente y el turismo cafre no llega hasta aquí porque, afortunadamente, Donibane no tiene playa, ni hoteles de lujo con spa.
Casa Mirones es, por tanto, sólo uno de los muy buenos restaurantes que tiene esta calle. Se accede a él por unas empinadas escaleras, pero la subida se agradece porque así se obtienen las magníficas vistas de las que goza su terraza. Cenar mientras anochece en el puerto, observando cómo maniobran los grandes barcos de carga, o cómo zarpa la pequeña lancha que comunica los dos Pasajes es una experiencia inolvidable.
Con semejantes vistas, la verdad es que apenas daría tiempo a fijarse en la decoración si no fuera porque los dueños parece que desean que lo hagas. Yo no sabría si catalogarla de kitsch o de encantadora. Quizá el rinconcito que tienen preparado para parejas de enamorados entre de lleno en el primer concepto. Pero el resto del restaurante, con su decoración rosácea, con sus bonitas lámparas chinas de papel, sus velas y sus fuentes de interior de circuito cerrado, la verdad es que resulta muy agradable.
Pero vayamos a lo importante en un restaurante. La carta de Casa Mirones está bastante bien surtida -al menos diez o doce platos por cada categoría. En los entrantes nos quedamos con ganas de probar las Vieiras salvajes con cigalas y espárragos trigueros, o el Milhojas de foie y manzana caramelizada. Pero nos decidimos por unos pimientos de Gernika con sal de Maldon y unas croquetas variadas, entre las que destacaban la de hongos y la de centollo. Ambos entrantes fueron servidos en bonitos platos de pizarra negra. Las croquetas quedaban así muy vistosas, pero no tanto los pimientos, de color verde oscuro, que apenas destacaban. Pero esto son pijadas... Lo importante es que las croquetas eran estupendas: grandes, perfecta y finamente rebozadas y con tropezones que garantizaban su autenticidad. Los pimientos de Gernika son una variedad de pimientos verdes muy pequeños y que se supone tienen un sabor muy suave y una textura muy tierna. Digo "se supone" porque no siempre es así, por más sellos de garantía Eusko Label que lleven. Sin embargo, los que nos pusieron en Casa Mirones eran exactamente como deben ser, tiernísimos, deliciosos y cocinados en su punto. Lo de usar la sal en escamas hay que reconocer que también es una excelente idea.
La sección de pescados de la carta era tan tentadora que al final optamos por un plato de degustación. La fuente que nos sacaron era enorme, con trozos limpios y rollizos de rape, mero, merluza y rodaballo, además de unos cuantos chipironcitos, todos ellos a la parrilla con su refrito de ajo. Absolutamente deliciosos. Y para hartarse. Por si te quedabas con hambre, incluían una enorme y riquísima patata al gratén.
En la sección de carnes fuimos con la recomendación de probar el solomillo. Lo preparan a la pimienta verde, al roquefort y al oporto. En principio no parece nada del otro mundo. En cualquier restaurante italiano los sirven así. Cuando nos presentaron el plato, sin embargo, comprendimos que aquello no tenía nada de común. El solomillo era una de esas piezas tan altas como anchas. Yo calculo que al menos irían allí 400 gramos de solomillo. Al hincarle el diente, además, apreciamos que se trataba de una carne tierna y sabrosa como pocas he tenido la oportunidad de probar. Ciertamente, se puede comer un solomillo impresionante en un puerto de mar: queda demostrado.
Como mi religión me impide beber alcohol, no puedo comentar adecuadamente el tema de las bebidas, salvo por el hecho de que la carta consta de una variedad de aguas minerales delicatessen. Me confieso ignorante en cuanto a este punto e incapaz de distinguir una de esas aguas delicatessen de un agua mineral normal. En mi modesta opinión, el agua del grifo de mi pueblo está mejor que la Font d´Or que me sacaron. Eso sí, me parece oportuno indicar que lo que en casa Mirones llaman "Tinto Reserva de la casa" consiste en... ¡un Beronia de 1999...!

Supongo que los postres serían muy buenos, pero no pudimos con ellos. Eso sí, el café era estupendo y la manera de presentarlo, preciosa.
En fin, esta pantagruélica comida, con vistas maravillosas a uno de los pueblos más bonitos del Cantábrico, nos salió por 55 €/persona.
Comiendo como comen, no es de extrañar que los sanjuandarras sean capaces de derrotar a Oxford, a Cambridge a Carlomagno... y quién sabe a quién más.


martes, 6 de julio de 2010

San Enfermines

Las ferias y fiestas de una localidad son de esas cosas sagradas con las que es mejor no meterse, so pena de terminar linchada. Pero habrá que hacerlo.
Durante todo el año, el solidario y democrático ciudadano se comporta con el civismo y la consideración que le han enseñado: no dice palabrotas delante de los niños, condena todo tipo de violencia y lee periódicos bajos en contenido ideológico. Una tiene la sensación de que tal dechado de urbanidad debe ser producto de un alma enjaulada. En efecto, así es: vienen los días especiales, en los que la jaula se abre y sale la bestia violenta, frustrada y cutre que realmente era aquel ciudadano del telemaratón solidario. La jaula se puede abrir algunos días especiales: despedidas de soltero, victorias de mi equipo de fútbol... A veces se queda abierta mucho tiempo, como en las guerras. Pero una ocasión muy especial y puntual a su cita la constituyen las ferias y fiestas patronales, que en muchos lugares del estado español constituyen una magnífica licencia para matar, herir, vejar, destrozar y degradarse.
Por motivos que nadie puede explicar, un obispo de Amiens del siglo III, supuestamente decapitado por la autoridad romana, es aclamado como si del Mesías se tratase todos los 7 de Julio en la ciudad de Iruña. Y entonces comienza un espectáculo en verdad propio de aquel siglo III decadente en el que la chusma solo se divertía si había sangre y dolor inocente de por medio. No voy a describir en qué consiste un encierro de San Fermín, porque es una fiesta universalmente famosa y que cuenta con la bendición de Hemingway, por lo que, encima, se le pretende otorgar valor cultural. Todos los partidos políticos y grupos de poder de la ciudad, desde la Izquierda Abertzale al Opus Dei, dan su visto bueno oficial a la fiesta que consiste en torturar animales a la vista de niños y mayores. A todos les parece correcto que también cada año unos cuantos descerebrados mueran en los encierros. Y es que una fiesta sin muertes violentas, no es una fiesta ¿verdad, plebe?
Las fiestas como las de San Fermín desvelan el interior enfermo de una sociedad que acumula violencia bajo su capa civilizada durante todo el año, y que, luego, unos días señalados, abre las letrinas para que toda la mierda que lleva dentro inunde las calles de la ciudad.

Para sintonizar con el tono jocoso y desmadrado que estas fiestas exigen, me permito colocar aquí un vídeo de El Reno Renardo dedicado a esa fiesta nacional que parece gustar también a muchos republicanos. Advierto que el vídeo contiene escenas muy desagradables en las que vemos a esos artistas de la tortura animal ejerciendo su noble tarea. Ciertamente, es horrible el vídeo. Pero más horrible es que toda una sociedad apruebe que esto sea una diversión.



Vistes un traje de luces/Arcadas lo que me produces/Ruín, cobarde y farlopero/Te escondes tras el burladero/Purito y Brandy Soberano/Pa echar la tarde de verano/Sádicos y malnacidos/Jalean desde los tendidos/Menudo pase de muleta/Que manejo del capote/Haces otra pirueta/Y un cuerno arranca tu cipote
Quiero verte atravesado/Empitonado y desangrado/En tu fiesta nacional/Ver tus tripas en bandeja/Cortarte el rabo y la oreja/En tu fiesta irracional
8 metros de intestino/Saliendo cual palomino/Por el esfinter anal/Esto es más que un arañazo/Higado páncreas y bazo/Estás abierto en canal
Quiero ver tu cráneo abierto/Y aprovechar el momento/Pa jiñar en su interior/Todas esas banderillas/Clávalas a tu familia/Cual brocheta de jamón.

lunes, 5 de julio de 2010

Polémica sobre el burka: Cui prodest?

Marco histórico de la polémica.
Estamos en un momento en el que se está produciendo una abolición de los derechos considerados "sagrados" hasta hace tan solo una década. Me refiero a los derechos de asociación, reunión y voto. En el estado español hace ya tiempo que se vulneran abiertamente estos derechos y cada vez los medios de comunicación emplean menos tertulianos en justificar el atropello.

Además está teniendo lugar un fenómeno que ya se ha repetido en la Historia, ejemplarmente durante los estertores finales del Imperio Romano. Se trata del derrumbe del paraíso artificial en el que se cree vivir, de la disolución de la frontera entre civilización y barbarie, o entre esclavos y ciudadanos. La debacle del Imperio capitalista se anuncia con la favelización de las grandes urbes europeas, la destrucción de las clases medias, la imparable decadencia cultural y moral, la ineficacia del estado, la inutilidad de las leyes... En estos contextos, el imperio en ruinas ha sabido buscar siempre chivos expiatorios: de modo que las persecuciones crueles e injustas han contado con el beneplácito de una masa a la que se ha desposeído de valores éticos y de la cultura necesaria para no sucumbir mentalmente a la propaganda.
En este marco, que es un arquetipo histórico, debemos situar la prohibición del burka que se ha hecho efectiva en el estado español. Así es más fácil entender el "cui prodest?" y, por tanto, el por qué, no solo de la ley, sino también de la polémica mediática. Veamos algunos de los puntos clave del asunto.

1. La polémica se ha generado artificialmente y su mera existencia fomenta el pogromo.

Ni que decir tiene que dicha polémica es artificial: tan artificial como las modas en el vestir. Es una polémica de laboratorio desarrollada por los medios de comunicación. En el año 2000 a ningún español le importaba un bledo lo que llevaban las mujeres musulmanas en la cabeza. Diez años después se ha logrado que la mayoría de los españoles consideren que ciertas vestimentas típicas de algunos países musulmanes sean denigrantes (!) para el sexo femenino. Se han adoptado medidas especiales de ambito privado, local y estatal para prohibir expresamente el uso una prenda -el burka- que, por otra parte, resulta extremadamente inusual en el estado español. No sé el número exacto, pero yo jamás he visto a ninguna mujer con burka. En París, una de las ciudades europeas con más población musulmana, no llegaban a mil. ¿Cómo se puede entender entonces que algo tan nimio genere tan enconado y machacón "debate" en las tertulias de radio y TV y una actividad legal tan febril y repentina?
También se asocia en los medios llevar el burka con una imposición del hombre a su esposa y, por tanto, con el machismo y la violencia de género. Tal falacia se desmiente fácilmente: con el contexto mediático y legal actuales, sería muy fácil para una mujer denunciar a su marido por obligarla a llevar burka: ella lograría así aparecer como una adalid de la libertad en todos los telediarios y su marido se pudriría en la cárcel y sería más odiado que Hitler y Calígula juntos. Pero esto no ocurre, lo mismo que no ocurre que ninguna mujer denuncie a su marido por obligarla a operarse los pechos.
Pero no solo estar en contra del burka es algo discriminatorio y absurdo. El mero hecho de plantear debates públicos sobre el tema ya lo es, pues da carta de cosa conflicto a algo que no lo debería ser ni, de hecho, lo era. Aunque a veces en los medios más "progres" se permite hablar a alguien a favor del derecho a llevar velo o burka, el mero hecho de que tal cosa se someta a debate es ya de por sí una monstruosidad. Debatir si los homosexuales están o no enfermos o si las mujeres pueden o no enseñar las pantorrillas en público es algo que nos parecería intolerable. Estas cosas ni se debaten, pues simplemente plantearse una de las opciones del debate es ya dar alas a posturas intolerantes e incluso inhumanas.

2. Se asocia falsamente el burka con el Islam y con ciertos regímenes políticos de Oriente Medio.

Por otra parte, se asocia el uso de esas prendas de vestir con la religión islámica. Pero el burka es una prenda tradicional (como en España la peineta o la barretina) propia de algunas tribus pashtun de Pakistán y Afganistán. Como a ojos occidentales resulta impactante, se la relaciona intencionadamente con el Islam dentro de la campaña islamofóbica que los medios de masas llevan a cabo y también se la mete en el mismo saco que otras prendas como el hiyab, el chador o el niqab.
Se confunde el hecho de que ciertas autoridades del Islam recomienden o exijan el uso de ciertas prendas con la propia religión islámica. Ello sería como considerar las procesiones de Semana Santa una característica esencial y definitoria del cristianismo, cuando lo cierto es que es una tradición que solo se da en algunos países y tampoco es un dogma de ningún tipo. Se puede llevar burka y no ser musulmana y se puede ser musulmana y llevar la cara descubierta, del mismo modo que se puede ser ateo y vestirse de nazareno o ser cristiano y detestar las procesiones.
Por otro lado, se insiste en mencionar a dos paises (Afganistán e Irán) como los más extremados en su exigencia de llevar velo y se ha relacionado a los gobiernos legítimos de ambos países con la responsabilidad de que ello sea así. Sin embargo, países tan extremados o más en este asunto como Arabia Saudita no son mencionados. Tampoco se menciona que los talibán fueron fieles alíados de Occidente hasta hace poco. O que el uso del velo en Irán estaba igualmente extendido antes de la Revolución de 1979.
Un dato altamente significativo es que en buena parte de las tertulias "velo sí, velo no" aparece alguna exiliada casualmente iraní, que cuenta lo mal que lo pasan las mujeres en ese país por culpa de Ahmadineyah y los suyos. Sólo le falta añadir: "Por favor, bombardeen mi país para que podamos dejar de llevar velo."


3. Se establece como criterio absoluto de "dignidad de la mujer" uno que es relativo.

Se argumenta que es denigrante para la mujer tener que salir a la calle totalmente tapada con un burka. Es muy discutible que un modo de vestir socialmente aceptado en una comunidad pueda ser considerado denigrante. Un poco de antropología y de sano relativismo cultural serviría para comprender que una prenda de vestir no es per se denigrante, sino que solo lo es su significado.
Pero no es necesario demostrar esto para comprender la falacia de los panfletos antivelo o antiburka. No es preciso que los cerebros lavados por la TV tengan que recordar que en el bachillerato estudiaron una cosa llamada relativismo cultural. Basta con que nos preguntemos si el burka es la única prenda incómoda o incluso algo sádica que se impone o se autoimponen las mujeres en el mundo.

-En Europa, andar sobre tacones de 15 cm. no solo limita seriamente la movilidad de una mujer, sino que le genera demostrados y serios problemas de salud.
-En en centro de África, las mujeres de las tribus mursi, todavía consideran un signo de distinción llevar un disco de arcilla que les deforma monstruosamente el labio inferior.
-En el sudeste asiático y en el sur de África muchas mujeres se colocan desde niñas aros en el cuello para estirarlos al máximo, pues se considera un signo de distinción y belleza. En Occidente hay quienes se someten voluntariamente a tan incómoda y poco saludable práctica. No solo eso: una de las razones por las que aun siguen existiendo mujeres que se estiran el cuello es porque los turistas occidentales están dispuestos a pagar por verlas y hacerse fotos con ellas. (Sí, esos mismos que no toleran que en sus ciudades las mujeres lleven un pañuelo en la cabeza)
-En el mundo occidental, la cirugía plástica se encarga de modelar con importantes riesgos para la salud, el cuerpo y el rostro de las mujeres según un canon diseñado por las multinacionales de la moda.

A pesar de ello ninguna ley prohíbe en nuestros paises occidentales estas y otras "modas" femeninas, muchas de las cuales entrañan un daño objetivo y evaluable a la mujer y no sólo un supuesto daño moral.

4. EE.UU, y sus aliados han iniciado un programa de invasión y expolio de los países de Oriente Medio.

Primero fue Irak, luego Afganistán y todo indica que pronto será Irán. Casualmente, son los mismos países a los que se les acusa de fomentar el uso del velo.


Conclusión: la polémica del burka beneficia las agresiones militares de EE.UU y sus aliados en Oriente Medio.

Con los tres primeros datos por un lado y el cuarto por otro, estamos en condiciones de contestar fácilmente a la pregunta "cui prodest?" "¿A quién beneficia la polémica sobre el burka o el velo?" Recapitulemos:

-La polémica ha sido creada por los medios de comunicación
-Se basa en mentiras
-Esas mentiras generan en la gente el odio a quienes llevan esas prendas y a los estados que se dice que las imponen (Irán y Afganistán.)
-Se está desarrollando una invasión injustificada de Afganistán -en la que España también participa- y se está preparando otra en Irán.

La opinión pública de Occidente ve justificado que se bombardeen países por el hecho de que sus mujeres visten de manera indigna. Si no fuera tan cruel parecería un chiste.
Así que, amigo lector, puedes estar en contra del uso del burka, como otros lo están del uso de la cirugía estética o las feministas de los 60 en contra del uso del sostén. Yo lo respeto y hasta lo comparto. Pero recuerda: una cosa es tener una opinión y otra querer imponerla a los demás por ley.
Y, sobre todo, recuerda aun más esto: cada vez que en este contexto actual menciones que te parece mal el uso del burka o te parezca oportuno "debatirlo", estás dando una coartada ideológica para la masacre humana, para la espantosa barbaridad que tus gobernantes están preparando para Irán desde sus despachos.

sábado, 3 de julio de 2010

Trucha con trufas.

Trufas y truchas... Con esta receta podríamos inaugurar una nueva sección que iría de unir alimentos que en realidad solo se parecen por sus nombres. Pavo con pato, tarta con torta, pechuga con lechuga, limón con melón, apio con opio... Pero, ciertamente, esto constituiría una chorrada indigna incluso de este blog, así que mejor vamos a dejarlo.
Este plato es un poco complicadillo y largo de hacer, más que nada la fase del empanado, pero si tenéis maña, tiempo y paciencia, lograréis un resultado de lo más exclusivo y en verdad delicioso. La salsa de acompañamiento es opcional, pero os aseguro que le va muy bien y, además, es muy sencilla de hacer.
Con respecto a las trufas, son uno de esos alimentos delicatessen, carísimos y algo decepcionantes, pero hay variedades en conserva que son baratas y se pueden utilizar para aderezar algunos platos. En esta receta hemos utilizado un botecito que contenía dos trufas pequeñitas con un peso de 10 gramos. Nos costó 2 euros.

Ingredientes para 4 personas:
Para la salsa:
-Cuatro cucharadas soperas de mayonesa.
-Una cucharadita de salsa de mostaza.
-Un pellizco de pimienta negra molida.
-Medio limón exprimido.
-Un chorrito de vinagre -mejor si es de arroz.
-Unas gotas de aceite de sésamo.
-Dos o tres aceitunas rellenas de anchoa bien picadas.
Para la bechamel:
-50 gr. de mantequilla.
-4 cucharadas soperas de harina.
-200 ml. de leche
-Un pellizco de nuez moscada.
-Sal
-10 gr. de trufas muy picadas.
Para la trucha:
-4 filetes de trucha
-Aceite de oliva
-Sal
-Pimienta negra
-Harina.
-Huevo
-Pan rallado
-Mantequilla.

Modo de elaboración:
Primero hacemos la salsa. Es tan fácil como mezclar los ingredientes y revolverlos bien con un tenedor. La metemos en el frigorífico.
La bechamel que necesitamos no es para dejarla enfriar, como si fuese para croquetas y, además, la necesitamos bastante espesa, porque es para rellenar los filetes. Así que utilizaremos menos leche de lo normal. Ponemos en un cazo la mantequilla a derretir y añadimos el harina. Removemos bien hasta que se fundan ambos ingredientes y luego vamos añadiendo la leche -es mejor que esté muy caliente- sin dejar de remover. Cuando tome un aspecto uniforme y una consistencia más bien espesa, le añadimos un poquito de sal, un pellizco de nuez moscada y las trufas bien picadas y removemos un poquito más. La reservamos.
Ahora vamos con los filetes. Los sazonamos y los embadurnamos de harina por el lado que no tiene piel y los ponemos en una sarten con un poco de aceite de oliva, con la parte sin piel boca arriba. Cuando estén dorados, los retiramos y les quitamos la piel -es muy facil: basta con tirar y sale sola.
Ahora cortamos en dos los filetes y, como si de un sandwich se tratara, los rellenamos con la crema de bechamel y trufas.
Ahora viene la parte del rebozado. Es un poco complicada, porque la consistencia de los filetes es quebradiza y se nos pueden romper en el proceso. Los envolvemos primero en harina, luego los untamos de huevo batido y por último les ponemos otra capa de pan rallado.
Para freir los empanados utilizaremos un trozo de mantequilla derretida y un poquito de aceite en una sartén poco grande. La ponemos bastante caliente y vamos poniendo los filetes uno a uno unos veinte segundos por cada lado.
Servimos recién hechos y los comemos acompañados por la salsa fría.
Buen provecho.

jueves, 1 de julio de 2010

Música anasheed.

El anasheed es la música religiosa musulmana. En su origen se trataba de una música vocal acompañada tan solo por instrumentos de percusión tradicionales. Sin embargo, ha ido evolucionando y adoptando diferentes estilos. En general, los músicos utilizan las formas musicales propias de su época y lugar de residencia, por lo que en la actualidad se encuentra anasheed en forma de reggae, hip hop, soul, etc.
Aunque en otro momento dedicaré un comentario a la delicada y melódica música anasheed tradicional a capella que nunca ha dejado de estar en primera linea, hoy me centraré en estas "fusiones" modernas tan atractivas para el gran público.
La música anasheed, aunque siempre conserva un mensaje religioso, no solo habla de Alá en un sentido místico; también aborda asuntos de la vida cotidiana y problemas de temática social. Resulta imposible ubicarla geográficamente ya que se extiende a lo largo de todo el mundo donde existen comunidades musulmanas. Es curioso, por ejemplo, el auge que actualmente presenta el hip hop anasheed alemán.
Como muestras de este tipo de música reciente, multiforme y en ascenso ofrezco dos vídeos.
Uno es de Mekka, un cantante de reggae afincado en Suecia y de origen saudí, que nos habla de la invasión, saqueo y genocidio de Irak por parte de los países "demócratas".



El otro es de Native Deen, un grupo de afroamericanos musulmanes de EE.UU. que cuentan la historia de una mujer convertida al Islam que, por no renunciar al velo, se queda sin trabajo. En el vídeo no faltan referencias a los iconos culturales propios del país.: el fútbol americano o la selección de personal, pero vistos desde la perspectiva islámica. El estribillo de la canción dice:

"I'm not afraid to stand alone
If Allah's by my side
Everything will be alright
Gonna keep my head up high!"

(No tengo miedo de estar solo.
Si Alá está a mi lado
todo irá bien:
¡Mantendré la cabeza bien alta!)